martes, 22 de enero de 2013

Celos...


Odio cuando los celos atenazan mis entrañas. Es la horrible sensación de que algo o alguien amenaza mi mundo y lo desmigaja como si no valiera nada entre sus dedos. Es inseguridad, es miedo, es caos… es todo y es nada a la vez. Lo peor es que me odio a mi misma por débil, por dejar que alguien cómo tu tenga ese poder sobre mí. No tiene nada que ver con el amor. Los celos se encuentran siempre al acecho, esperando que des un paso en falso,  a que cruces una esquina… y cuando quieres darte cuenta ya se han apoderado de ti y te dominan nublando todos tus sentidos. 

Intento ganar esta batalla, dejarlos al margen de mi vida y no dejar que se apoderen de mí. Respiro hondo planteándome si seré capaz de ser fuerte no sólo para hacerle frente a ellos, sino para desvincularme de ti.  

2 comentarios:

  1. Los celos tienen un poder enorme sobre nosotros pero como todo, podemos controlarlo y no dejar que nos dominen y creo que pronto ganarás esa batalla

    ResponderEliminar
  2. En realidad nunca he sido celosa con una pareja, nunca en esa ocasión me han ganado los celos. Suelo ser más celosa con mis amigos... (que desastre). Pero no, no voy a dejar que me ganen ni ahora ni nunca.

    ResponderEliminar